Cuando hablamos de resiliencia nos referimos a nuestra capacidad para adaptarnos positivamente a situaciones de incertidumbre como la actual contingencia del COVID-19. Las personas resilientes tienden a poseer un mejor control de sus emociones y son capaces de superar la adversidad con mayor facilidad.
La contingencia ha transformado nuestra vida cotidiana, desde trabajar de manera remota, tomar clases en línea y limitar las actividades sociales; muchas personas pueden experimentar estrés, angustia, miedo o ansiedad, por ello desarrollar la resiliencia durante la cuarentena es clave para superar esta situación.
Para desarrollar la resiliencia es importante que identifiques en qué etapa te encuentras, a continuación te compartimos sus fases:
Reconocer: El primer paso es identificar la situación que atraviesa nuestro país debido a la emergencia sanitaria, tanto negocios como escuelas han cerrado sus puertas para cumplir las medidas de distanciamiento social.
Aceptar: La siguiente etapa es aceptar que la contingencia a transformado nuestra vida cotidiana, es momento de desarrollar estrategias para continuar con tus actividades.
Crea una rutina: Una vez que has definido las estrategias para continuar con tus tareas, lo siguiente es crear una rutina; organiza tus pendientes y establece horarios.
Define metas: En esta etapa comienzas a plantearte nuevos objetivos, este tiempo en casa es una oportunidad para reflexionar acerca de tus propósitos profesionales.
Ahora bien, para desarrollar la resiliencia es importante que mantengas una actitud positiva, esto te ayudará a ver las cosas con mayor objetividad durante los momentos de incertidumbre, este tiempo en casa representa una valiosa oportunidad para crecer en el ámbito profesional y personal, confía en tu capacidad para adaptarte al cambio.
Por último, un aspecto fundamental en el camino a la resiliencia son las redes de apoyo, permanecer en contacto con tus familiares y amigos más cercanos te ayudará a superar esta situación.
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